Durante la enfermedad renal hay varias fases por las cuales el paciente siente y actúa diferente:
- En los primeros días tras el diagnóstico, el temor y el recelo son las emociones que pueden imperar en el paciente, debido a la incertidumbre sobre lo que puede pasar.
- A medida que transcurren las semanas, el paciente se encuentra mejor debido a que existe una solución a su problema: las máquinas-bolsas. Hay más optimismo, euforia y bienestar.
- A partir de los 6 meses, la dependencia al tratamiento y el futuro incierto provocan sentimientos frecuentes como: desencanto, tristeza y angustia.
- Es al año, cuando usualmente el paciente se va adaptando a las nuevas experiencias y situaciones que acontecen. Es en esta fase cuando relucen los mecanismos de defensa como: oposicionismo, discusiones, aislamiento o desconfianzas.
- Con el paso del tiempo, se consigue un grado de aceptación, que varía en cada individuo. Habrá variaciones en el estado de ánimo: ira, alegría, apatía…
Desde ALCER Cádiz, te acompañamos y asesoramos en todo este proceso. Además, cuenta con servicio de asistencia psicológica, individual y familiar.
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